El Movimiento Cubano de Excursionismo, entre los días 9 y 14 de octubre, protagonizó una excursión a la Sierra Maestra en homenaje a la caída del Che.
Alrededor de 60 kilómetros de intrincada Sierra, desde Buey Arriba a Bartolomé Masó, con la lluvia de acompañante, caminos casi extintos, lodazales, subidas y bajadas infinitas, noches de frío violento, pero también resistencia, solidaridad, disciplina, amor por el excursionismo y la Revolución Cubana, caracterizaron la atrevida hazaña.
El itinerario incluyó la visita a la zona del Hombrito, en dónde se visitó la tumba del guerrillero caído Hermes Leyba, y se subió la Loma de la Bandera y los Altos de Conrado, así como una escalada al Pico Turquino.
Ejemplos como el de la tenaz Lucía, excursionista de 6 años de edad, inspiraron voluntad para la conclusión exitosa de esta guerrilla, al estilo de los Rebeldes, como la describieron algunos de sus participantes.
Miguel Alfonso Sandelis, líder del Movimiento Cubano de Excursionismo, seguidor del principio martiano: subir loma hermana hombres..., garantiza que una montaña es espacio de formación por excelencia, en momentos de neoliberalismo extremo.
En 1994, Sandelis junto a su grupo de excursionismo Mal Nombre, colocó un busto del Che en el Pico de la Bandera, para homenajear la decisión del Guerrillero Heroico, de emplazar ahí una enseña cubana, dicen que vista desde el llano.
Ahora, estudiantes, trabajadores y niños, conformaron el grupo de 56 personas que durante 4 días de mochilas a las espaldas, protagonizaron de nuevo la guerrilla, que se recuerda dura pero hermosa.
El Movimiento Cubano de Excursionismo, desde su constitución en 2013, ha venido articulándose en el propósito de formar valores a partir del conocimiento activo de nuestra geografía.
escrito por Claudia Rafaela Ortiz Alba
(Tomado de Radio Reloj)
Fotos tomadas del perfil de Facebook de la autora